El completo disfrute de nuestros scooters estará directamente relacionado con el nivel de información que recibimos al momento de la compra, la lectura completa y apropiada del Manual de Funciones de nuestro equipo, y el alcance del apoyo que pueda ofrecernos nuestro asesor, que está igualmente relacionado al 100% con la veracidad de la información que tengamos a bien suministrarle. Por esta razón, y entendiendo que en algunas oportunidades olvidamos detalles muy importantes, continuamos disponiendo de estos capítulos de refuerzo para el cuidado general que igualmente se encuentra en nuestro Manual de Funciones.
El voltaje de nuestros equipos (voltios), en conjunción con el vataje (watts) de los mismos y el amperaje del controlador (A) —y no el de la batería (Ah)—, determinarán el torque y la capacidad de respuesta de nuestros equipos al momento de enfrentarnos a pendientes. Pero en términos generales, hay rutinas del equipo que nos ayudan a identificar en qué momento comenzamos a sobreesforzar la capacidad de nuestro equipo.
Para mantener el equipo en condiciones apropiadas, debemos recordar siempre estos 3 parámetros básicos:
- Toda pendiente debe subirse impulsado y en velocidad 3.
- A diferencia de un vehículo con motor de combustión, la velocidad 1 en un scooter eléctrico MIGO no obedece a la bien conocida primera marcha en los automóviles. Por el contrario, es un limitador de velocidad que ahoga la capacidad máxima del equipo, y enfrentar pendientes en esta velocidad es condenar nuestro scooter, su controlador e incluso su motor al daño inminente. Por lo tanto, debemos tener muy claro el punto anterior y siempre subir pendientes en velocidad 3.
- Si observamos que nuestro scooter eléctrico MIGO comienza a disminuir progresivamente la velocidad al subir una pendiente y llega a 12 km/h, debemos suspender la conducción y continuar el trayecto de otra manera. Esta es una señal muy clara y evidente de que la pendiente que estamos enfrentando es demasiado para el equipo.
- Si nos vemos obligados a suspender la marcha en una pendiente, debemos evitar intentar iniciar de nuevo sin el impulso correspondiente, especialmente en equipos de un solo motor. Esto puede generar daños en el controlador.
Recordatorio:
¿Cuándo suspender inmediatamente la marcha? Cuando, al estar subiendo una pendiente, el equipo no esté por encima de los 12 km/h en movimiento. ¡Si llegamos a 12 km/h, hay que parar inmediatamente y bajarnos del scooter!
Para tener en cuenta:
- Todo manejo en pendientes que obligue a tomar los respectivos descensos provoca desgaste de las pastillas de freno, lo que disminuye su vida útil.
Con la atención que decidamos poner a las recomendaciones, podremos extender esta maravillosa experiencia de recorrer el mundo en nuestros amados scooters.